4500 millones de años de soledad - Los Amparito


Por Francisco Cantú

Puede llegar en cualquier momento. Se convierte en la luz que pasa por la ventana una mañana de un día frío, la sensación de estar enfermo y no poderse levantar, un olor inexplicable o una canción. Llega y da vueltas y es difícil que se vaya. Por más que uno se resista a ignorarlo, está ahí taladrando la memoria y dejándonos saber que nunca se podrá volver a sentirlo. A veces dan ganas de dejar todo e intentarlo repetir, pero el ridículo ejercicio sólo deja otra oleada de nostalgia. Lo único que queda es sentarse, cerrar los ojos, esperar a que salga tu abuela a decirte es hora de cenar y poderle decir "te quiero abue".

Los Amparito - 4500 millones de años de soledad from Jaiziel Hernández Máynez on Vimeo.